Si todavía no has probado esta maravilla verde, prepárate para descubrir un ingrediente que puede transformar tus desayunos, meriendas y hasta tus cenas. La crema de este fruto tiene un sabor único, suave, ligeramente dulce y con ese punto tostado que engancha. Pero lo mejor es su versatilidad, sirve tanto para preparar postres como para acompañar platos salados.
Las ideas con crema de pistacho van mucho más allá de untarla en una tostada. Puedes usarla en bizcochos, batidos, canapés e incluso en recetas con carne o pasta. Y si estás pensando: “vale, ¿pero cómo la aprovecho de verdad?”, tranquilo, que en Casarella, como expertos en el cultivo y venta online de esta bomba de nutrientes, te contamos las mejores formas para disfrutarla.
¿Qué es exactamente la crema de pistacho?
La crema de pistacho es una preparación elaborada a partir del fruto seco molido, hasta conseguir una textura suave y untuosa. En su versión más pura, solo lleva pistachos, aunque algunas variedades pueden incluir azúcar, leche o aceite para darle un toque más dulce o una consistencia distinta.
Ingredientes y textura
Los ingredientes varían según el tipo de crema. Las más naturales, solo contienen pistachos 100 %, sin aditivos ni conservantes, otras pueden incluir azúcar, leche y aceite. El resultado es una textura cremosa, parecida a una mantequilla de frutos secos, ideal para untar o incorporar a otras elaboraciones.
Diferencia entre crema y pasta de pistacho
Puede parecer que son lo mismo, pero lo cierto es que no, la crema es más ligera, pensada para consumo directo o recetas sencillas. La pasta es más densa y concentrada, usada sobre todo en repostería profesional o heladería. Ambas tienen su lugar, pero no son lo mismo.
Cómo se puede comer la crema de pistacho (formas más comunes)
Este ingrediente sirve para mil cosas. Desde un desayuno rápido hasta una cena improvisada. Las formas de comer crema de pistacho son tantas que te vas a sorprender. Aquí van algunas de las más conocidas (y deliciosas).
Untada en tostadas o pan
Lo más sencillo y lo más rico. Una tostada calentita con una cucharada de crema de pistacho encima es un desayuno de diez. Puedes añadirle fruta, un poco de canela o incluso un toque de sal si te va lo salado.
Como topping para yogures y frutas
Una idea ideal para quienes se preguntan cómo usar crema de pistacho. Añádela a un bol de yogur natural con plátano, fresas o mango, y tendrás un desayuno o merienda que alimenta y alegra el día.
Añadida a smoothies o batidos
Con leche, plátano, hielo y una cucharada de crema de pistacho puedes hacerte un batido súper cremoso, perfecto para antes o después del ejercicio, o como alternativa dulce a media tarde.
Rellena de bizcochos, croissants o crepes
Si no has probado los croissants rellenos de crema de pistacho, no sabes lo que te estás perdiendo. También queda espectacular como relleno de bizcochos, crepes o incluso panecillos caseros.
Mezclada con queso para canapés salados
Combina crema con queso crema o ricotta, y tendrás una mezcla suave, sabrosa y original para untar en tostas, crackers o usar como relleno en canapés o tartaletas.
Recetas dulces con crema de pistacho
Además de ser deliciosa por sí sola, la crema de pistacho en repostería da muchísimo juego. Aquí tienes algunas recetas sencillas que puedes hacer en casa sin complicarte.
Tarta de queso con crema de pistacho
La tarta de queso con crema de pistacho es un postre sencillo y con un toque diferente que no pasa desapercibido.
Ingredientes:
- 200 g de galletas
- 80 g de mantequilla
- 500 g de queso crema
- 200 ml de nata
- 100 g de azúcar
- 2 huevos
- 3 cucharadas de crema
- Pistachos troceados para decorar
Preparación:
Tritura las galletas, mézclalas con mantequilla derretida y forra la base de un molde. Mezcla el queso, nata, azúcar, huevos y la crema. Vierte sobre la base y hornea 45 min a 180 °C. Enfría, decora y disfruta.
Bizcocho marmolado de pistacho
Este bizcocho con crema de pistacho es ideal si te apetece algo esponjoso y con un sabor suave pero original.
Ingredientes:
- 3 huevos
- 150 g de azúcar
- 180 g de harina
- 1 sobre de levadura
- 100 ml de leche
- 100 ml de aceite de girasol
- 2 cucharadas de crema
Preparación:
Bate huevos con azúcar, añade leche y aceite. Incorpora la harina y levadura. Divide en dos y añade la crema a una parte. Alterna ambas masas en un molde y hornea 35-40 min a 180 °C.
Vasitos de yogur con crema y granillo
Uno de los postres con crema de pistacho más rápidos y resultones. Perfecto para improvisar una merienda.
Ingredientes:
- Yogur griego
- 2 cucharadas de crema
- Miel
- Pistacho troceado
Preparación:
En un vasito, pon una capa de yogur, una de crema, un chorrito de miel y pistachos troceados por encima. Ideal como postre fresco y rápido.
Helado casero de pistacho
Con pocos ingredientes puedes preparar un helado de pistacho casero cremoso, natural y sin complicaciones.
Ingredientes:
- 400 ml de nata
- 200 ml de leche
- 100 g de azúcar
- 3 cucharadas de crema
Preparación:
Bate todos los ingredientes y llévalos al congelador, removiendo cada hora para evitar que cristalice. En unas 4-5 horas lo tendrás listo.
Galletas rellenas de crema de pistacho
Estas galletas rellenas de crema de pistacho se preparan en nada y son perfectas para acompañar el café o llevar como snack.
Ingredientes:
- Masa de galletas (casera o comprada)
- 1 cucharada de crema por galleta
Preparación:
Haz bolitas con la masa, aplana, pon un poco de crema en el centro y cierra como si fuera una empanadilla. Hornea a 180 °C durante 12-15 min.
Recetas saladas con crema de pistacho
Aunque solemos asociarla al dulce, hay muchas recetas con crema de pistacho que combinan con ingredientes salados. Estas son algunas ideas originales para probar algo distinto.
Vinagreta o salsa para ensaladas
Mezcla crema con aceite de oliva, un chorrito de limón y sal. Úsala como aliño para ensaladas verdes o de pasta. Aporta un toque diferente, cremoso y sabroso.
Relleno de pechugas de pollo o rollitos de calabacín
Combina la crema con queso de cabra o ricotta y usa la mezcla para rellenar una pechuga de pollo al horno o unos rollitos de calabacín a la plancha. Sano y original.
Topping para hummus o crema de aguacate
Sirve tu hummus casero con una cucharadita de crema de pistacho por encima, un chorrito de AOVE y un toque de pimentón. También queda de lujo sobre guacamole.
Pasta con crema de pistacho y parmesano
Cocina tu pasta favorita y mézclala con crema de pistachos, un poco del agua de cocción y parmesano rallado. Añade pimienta y albahaca. Cremosa, rápida y sabrosa.
Cuánta crema de pistacho se recomienda comer?
Aunque está buenísima y es muy nutritiva, hay que tener cabeza con las cantidades. Tiene un alto valor calórico, así que lo mejor es disfrutarla con moderación.
Si te preguntas si la crema de pistacho engorda, la respuesta es, depende. Un par de cucharaditas al día son perfectas dentro de una dieta equilibrada. Pero si te pasas con los croissants y las cucharadas a escondidas… pues ya sabes.
¿Es saludable comer crema de pistacho todos los días?
En principio, sí, la crema de pistacho es saludable, siempre que sea natural, sin azúcares añadidos ni aceites refinados. Aporta grasas buenas, proteína vegetal, fibra, vitaminas y minerales.
Eso sí, la clave está en la moderación y en la calidad. Si quieres probar alguna de estas recetas y buscas una crema cien por cien natural, sin colorantes ni conservantes, en Casarella puedes encontrarla en diferentes formatos para que escojas tu favorito.
¿Cómo se come la crema de pistacho?
Se puede untar en pan, añadir a yogures o usar como ingrediente en recetas dulces y saladas.
¿Con qué se puede combinar la crema de pistacho?
Con fruta, queso, yogur, pan, pasta o incluso en vinagretas. Es muy versátil.
¿La crema de pistacho se puede usar en recetas saladas?
Claro, combina muy bien con platos como ensaladas, pastas o carnes suaves como pollo o calabacín.
¿Cuánta crema de pistacho puedo comer al día?
Con una o dos cucharaditas al día es más que suficiente para disfrutarla sin excesos.
¿Qué postres se pueden hacer con crema de pistacho?
Desde bizcochos y tartas hasta helados, galletas y vasitos de yogur. Le da un toque único a cualquier dulce.